Había una vez...

Dos maestras que disfrutaban con su trabajo y querían transmitir a los niños y niñas el placer por aprender jugando.

Nos presentamos, somos Erika y Raquel, dos maestras de Educación Infantil que entendemos la educación de una forma diferente.

Como dice Loris Malaguzzi "El niño tiene cien lenguajes, cien manos, cien pensamientos, cien formas de pensar, de jugar y de hablar, cien siempre, cien formas de escuchar, de sorprender, de amar, cien alegrías para cantar y entender." Partiendo de esta idea, nosotras queremos que nuestros alumnos/as tengan en nuestra escuela un lugar donde aprender jugando, observando, tocando, sintiendo, experimentando, investigando, manipulando, compartiendo... en definitiva viviendo cada día como algo único.

Con esto pretendemos que nuestros alumnos/as sean partícipes de su propio aprendizaje, porque las palabras se olvidan, pero las vivencias permanecen: "Dime algo y lo olvidaré, enséñame algo y lo recordaré, hazme partícipe de algo y lo aprenderé" (Confucio).

No sólo queremos transmitir conocimientos, sino también formar personas que sean capaces de respetar y convivir con la diversidad, porque al fin y al cabo todos somos diferentes.